La asociación entre Fraternidad – Misiones HumanitariasInternacionales (FMHI) y el Fondo Canadá para Iniciativas Locales (CFIL), que comenzó en agosto de 2023 y finalizó en febrero de 2024, tuvo como objetivo ampliar las actividades que se venían desarrollando en el Centro Cultural y deFormación Indígena (CCFI) de Boa Vista, Roraima.
El proyecto ofreció diversos cursos de formación para migrantes indígenas, refugiados y residentes de albergues en la ciudad de Boa Vista – RR y en la Comunidad Ta’rau Paru, en Pacaraima-RR, y tuvo como objetivo central mitigar la vulnerabilidad, promover la inclusión social y construir oportunidades de medios de vida, con especial atención a la igualdad de género.
La coordinadora de la Misión Roraima Humanitaria, la hermana Maria Raquel, explica que «el proyecto se desarrolló para contribuir a la acogida de los migrantes indígenas como sujetos de derechos y no sólo como víctimas, así como para apoyar la preservación y el fortalecimiento intercultural y la inclusión socioeconómica de las etnias atendidas por el CCFI«.
En este sentido, el proyecto involucró a aproximadamente 90 mujeres en cursos técnicos, así como apoyo a emprendimientos indígenas, con la participación de 12 mujeres multiplicadoras, pudiendo llegar a otras 150 mujeres y hombres indígenas migrantes.
La propuesta de proyecto también incluyó recursos para el seguimiento y la evaluación de las actividades, la celebración de grupos de debate, la evaluación de objetivos e impactos, la elaboración de informes y visitas a la comunidad indígena Ta’rau Paru.
Mónica William, de la comunidad indígena Ta’rau Paru, expresa su agradecimiento por la oportunidad de participar en el Curso de Corte, Costura y Modelaje y su deseo de seguir aprendiendo, buscar cursos avanzados y convertirse en una profesional en el campo de la moda y la costura. Además, subraya su objetivo de no sólo de absorber conocimientos, sino también de «enseñar a otros jóvenes y mujeres, con el fin de formar una empresa y preservar la cultura trabajando en un taller de costura».
Visita del embajador de Canadá
El embajador de Canadá, Emmanuel Kamarianakis, visitó el CCFI, simbolizando el compromiso y apoyo del Fondo Canadiense para Iniciativas Locales al proyecto de formación y emprendimiento dirigido a los migrantes indígenas venezolanos, guyaneses y brasileños atendidos en el espacio. La asociación se diseñó para fortalecer a estas comunidades ofreciéndoles oportunidades concretas de inclusión social y económica.
Durante la visita, el embajador conoció un poco más sobre los avances del proyecto y fue presentado a los miembros de la Asociación deMigrantes Indígenas de Roraima (AMIR) y de la marca de moda incubada en el CCFI, Tida Warao, ambas formadas por migrantes indígenas venezolanos y beneficiarias de la asociación entre la Fraternidad – Misiones Humanitarias (FMHI) y el Fondo Canadá.
También pudo presenciar la entrega de dos mesas para revelar serigrafía a AMIR por parte del equipo del CCFI.
Actividades desarrolladas gracias a la asociación
La asociación con el Fondo Canadá para Iniciativas Locales (FCIL) ha dado lugar a programas que van más allá del simple aprendizaje, abordando cuestiones esenciales para el desarrollo personal y profesional, incorporando orientaciones sobre el comportamiento profesional, la cultura brasileña y habilidades para afrontar los retos del día a día
Ane Viriato, profesora del curso de Corte y Costura, destaca la atmósfera de alegría de las clases, donde el intercambio de conocimientos fue más allá de la enseñanza técnica y se vio influido por la riqueza cultural de las alumnas. «La creatividad de cada alumna está influenciada por su ancestralidad y enriquece aún más el aprendizaje. La experiencia fue gratificante, y agradezco a los alumnos por el intercambio; les deseo éxito y que puedan replicar los conocimientos adquiridos.»
Este abordaje holístico se destaca en el Programa deFormación Continua para el Desarrollo (PFCD), que moviliza competencias humanas y herramientas técnicas pertinentes para la vida y la inserción productiva en el mundo laboral, de modo que los individuos puedan alcanzar la autonomía, asumiendo responsabilidades y desempeñando un papel protagonista en su vida personal y colectiva. En la asociación con el FCIL, el programa incluía los siguientes cursos de formación
Ayudante de cocina:
El curso de ayudante de cocina, por ejemplo, no se limitaba a la preparación de alimentos, sino que abarcaba aspectos como la vestimenta adecuada, la higiene personal y la organización del entorno. Los participantes, en su mayoría inmigrantes indígenas de la etnia warao, adquirieron valiosos conocimientos sobre buenas prácticas de manipulación de alimentos. Este curso, sumado al de panadería, proporciona una formación integral en el área de la gastronomía, enriqueciendo los currículos de los graduados.
Panadería
El éxito de esta iniciativa, que tuvo una duración de 40 horas, proporcionó formación a través del Centro Educativo Macunaíma y culminó con la capacitación de 12 indígenas, preparándolos para entrar en el mercado laboral y lograr la autosuficiencia.
Según el equipo del CCFI, la formación fue un verdadero éxito «debido a toda la planificación y seguimiento por parte del equipo, la atención a las buenas prácticas en la preparación de alimentos proporcionada e impartida por el facilitador y el interés y dedicación mostrados por los participantes».
Reponedor de mercadería
Con una duración de 40 horas, el curso capacitó a 18 indígenas de las etnias Warao, Kariña, Taurepang, Kamarakoto y Sanumá, que, a través de experiencias lúdicas, teóricas y prácticas, conocieron las funciones de esta profesión en auge en Roraima y Brasil, siendo los supermercados, hipermercados y tiendas los establecimientos con más vacantes de empleo.
Unidades Productivas y Taller de Costura
La comunidad indígena Ta’rau Paru, formada por pueblos taurepangs brasileños y venezolanos, presentó siete proyectos de desarrollo, denominados Unidades Productivas. Cinco de estos proyectos cuentan con el apoyo de la Fraternidad – Misiones Humanitarias (FMHI) desde 2022, involucrando iniciativas como barbería, piscicultura, costura, serigrafía, artesanía y agroecología.
El apoyo de la FCIL posibilitó la donación de máquinas de coser semindustriales, telas, mesas de serigrafía y otros equipos que serán utilizados para la instalación de un taller de costura, impulsando estos emprendimientos y promoviendo el desarrollo local a través del empoderamiento de las mujeres indígenas.
Equipos del Centro Cultural y de Formación Indígena (CCFI) y de la Asociación de Migrantes Indígenas de Roraima (AMIR) visitaron la comunidad indígena Taurepang de Ta’rau Paru y fueron recibidos con fiesta por los indígenas que viven allí.
Uno de los objetivos del proyecto es crear un taller de costura en el que participe un grupo de mujeres, así como un punto de producción de ropa con pinturas serigrafiadas dirigido a los jóvenes residentes de la comunidad.
Corte, Costura y Modelaje
El curso supuso un punto de inflexión en la vida de 12 migrantes indígenas venezolanos de las etnias taurepang, warao y wayúu. Apoyan esta formación las mujeres indígenas de la marca Tida Warao, así como el taller de costura de la comunidad indígena Ta’rau Paru.
Las mujeres participantes, cada una con sus propios anhelos, expectativas y proyectos de vida, supieron aprovechar todos los conocimientos y la dedicación de la profesora del Centro Educativo Macunaíma para alcanzar el éxito.
Con una duración de 40 horas, la formación incluyó teoría, aprendizaje de puntos a mano, técnicas de modelado y práctica con una máquina doméstica, lo que llevó a las aprendices a confeccionar pequeñas prendas de vestir, accesorios para el hogar y minivestimentas.
El final del curso fue un desfile de muñecas vestidas con conocimientos, creatividad, sentimientos y una despedida.
Serigrafía
Una vez más, indígenas migrantes venezolanos de las etnias Taurepang, Warao, Wayúu y brasileños Macuxi y Wapixana expresaron su creatividad ancestral a través de los conocimientos técnicos adquiridos durante el curso de serigrafía.
Jóvenes de la Comunidad Indígena Ta’rau Paru, de Pacaraima, Roraima, formaron parte de los participantes en el curso de 32 horas, que incluyó conceptos, procesos, productos, consejos de mercado y la práctica de elaboración del molde, uso de la mesa de serigrafía, aplicación de la pintura con radillos y retoque de la pintura.
El instructor del curso fue un indígena venezolano migrante voluntario con amplia experiencia tanto en el oficio como instructor.
Informática
Los graduados del curso de informática de nivel intermedio de las etnias Kariña, Taurepang y Warao se llevan consigo algo más que solo conocimientos tecnológicos; también incorporan orientación para ayudarles a superar los retos que les plantea la vida.
Los conocimientos transmitidos van desde conceptos básicos a otros más complejos, como sistemas de manipulación de datos, investigación con buscadores del ciberespacio, uso de herramientas de diseño y aplicaciones de presentación gráfica.
El proceso de acompañamiento humano de los aprendices, así como su progreso en el aprendizaje, es la principal característica distintiva del Programa de Formación Continua para el Desarrollo (PFCD), que se centra en la capacitación de migrantes indígenas para su inclusión social y económica en el contexto nacional. Los cursos de informática forman parte del módulo de LaTecnología del programa.
Portugués
El curso de portugués de nivel intermedio tuvo una duración de 60 horas, con 20 participantes, y ayudó a profundizar los conocimientos obtenidos en los cursos de portugués de nivel básico celebrados durante el año, en los que participaron representantes de los pueblos taurepang, warao, akawaio y wayúu.
Aprender la lengua del país de acogida ayuda a forjar vínculos con la comunidad local y garantiza una inserción económica mejor y más duradera en el lugar donde desean quedarse. Frente a las dificultades lingüísticas, enseñar portugués a los inmigrantes es una forma de acogerlos y, al mismo tiempo, un paso importante hacia la consecución de los derechos humanos.
El trabajo final fue un homenaje a la unión de pueblos y culturas a través de la interpretación de una conocida canción del pop brasileño, cantada en portugués por los propios participantes.
Feria Intercultural
La edición navideña de la Feria Intercultural Indígena, celebrada el 23 de diciembre de 2023, también contó con el apoyo del Fondo Canadiense para Iniciativas Locales (FCIL) y tuvo como protagonista al árbol buriti, considerado el árbol de la vida en la cultura indígena. Contó con la participación de más de 50 expositores indígenas de 12 etnias diferentes, en su mayoría migrantes venezolanos y guyaneses, pero también brasileros locales, que presentaron sus productos artesanales.
Según sus organizadores, «fue un evento alegre y espontáneo, marcado por la pureza y suavidad de los niños cantores indígenas y el apoyo del público visitante, que se unió a las danzas y prácticas ancestrales indígenas».
