Dia Internacional de la Paz

El respeto y el amor incondicional a todos los seres son los cimientos de la Fraternidad Humanitaria (FFHI) para la promoción de una cultura de paz.

Hoy, 21 de septiembre, se conmemora el Día Internacional de la Paz, fecha establecida por las Naciones Unidas (ONU) en 1981 con el objetivo de posibilitar acciones que promuevan el fin de los conflictos entre los pueblos.

En 2021, el tema de la fecha es «Recuperarse mejor para un mundo justo y sustentable», proceso en el que la  la FraternidadHumanitaria (FFHI) viene trabajando a diario en sus acciones en la gestión de cinco albergues para refugiados venezolanos en el estado de Roraima con el apoyo de ACNUR.

Víctimas de un proceso de exclusión previo a la crisis socioeconómica que atraviesa Venezuela en los últimos años, los pueblos indígenas de ese país enfrentan numerosos obstáculos para construir una vida digna y pacífica, ya sea en Brasil o en otros países donde buscan refugio. Actualmente, hay más de dos mil indígenas en albergues bajo la gestión de la Fraternidad Humanitaria (FFHI).

“Hoy existe una clara percepción de que el logro de la autonomía y la reintegración social, cultural y económica de los pueblos indígenas venezolanos son factores clave para que se garantice la seguridad, el futuro y la paz de estas poblaciones”, evalúa el monje de la Orden Gracia Misericordia Fray Thomas.

El Sector de Soluciones Duraderas de la Fraternidad – Humanitaria (FFHI), junto con ACNUR, dentro de la Operación acogida, prevé un conjunto de intervenciones humanitarias para que estos objetivos se logren como cursos de formación profesional, aprendizaje de portugués e informática, talleres de emprendimientos e, incluso, una escuela de formación de líderes (en alianza con el Instituto Insikiran), cuyo objetivo es formar líderes y representantes de las etnias Warao, Eñepa, entre otras, capaces de comprender sus derechos y deberes en este desafiante escenario de reconstrucción de sus vidas en Brasil.

Según Fray Thomas, “en otra vertiente del servicio, la Fraternidad – Humanitaria (FFHI) busca construir un ambiente de protección y asistencia que, a través de un equipo multifuncional, asista y monitoree los diferentes niveles de vulnerabilidad de la población acogida y actúe haciendo la conexión de  estas necesidades y personas con la red pública de asistencia y servicios sociales disponibles. También busca fortalecer las bases comunitarias con la creación de comités locales y apoyo al mantenimiento de la cultura tradicional”.

El monje afirma que la institución lleva los principios de la Fraternidad – Humanitaria (FFHI) a situaciones del planeta donde hay sufrimiento. “El servicio incondicional a todos los seres, una cultura de paz, respeto y amor son los pilares fundamentales de toda acción”, dice.

Este servicio permitió realizar más de 20 misiones en lugares de conflicto y situaciones de extrema vulnerabilidad de pueblos, como en Oriente Medio y África, además de la labor de casi cinco años de la Misión Roraima Humanitaria.

“También fue debido al respeto y adhesión a los principios universales de los derechos humanos que la Fraternidad Humanitaria (FFHI) se convirtió en el punto focal del Movimiento Esfera en Brasil y tradujo la última versión del Manual Esfera al portugués, ayudando a difundir los marcos globales de respuesta humanitaria que garanticen, a distintos niveles, la calidad de la asistencia y la dignidad humana de las personas asistidas en crisis humanitarias”, recuerda.

Finalmente, Fray Thomas destaca un lema que define muy bien el servicio que realiza la organización en la búsqueda de la implementación de la paz: “Solo el Amor puede curar el dolor”.